En cierto monte del municipio de Santo Domingo de la región de Antioquia hay un cerdo que nadie conoce, hasta ahora que vamos a contar su historia. Él nunca se acercaba a los humanos. Un día fue un señor al monte a cortar árboles y el cerdo se escondió, el corto los árboles y se fue. Después el cerdo salió y miro los árboles que habían cortado, pero no le preocupo porque eran solo unos cuantos, pero en el pueblo paso algo: la madera subió porque estaban construyendo en la ciudad. Entonces fueron al monte con caballos, motosierras, hachas y machetes. El cerdo se escondió en las ramas y observaba el daño que le hacian al monte. y penso en hacer algo pero no sabia que los humanos estaban a punto de acabar con el monte; a ellos solo les importaba la plata, sin pensar en el mal que se hacian ellos mismos.
Mientras tanto el cerdo por fin pensó en algo e hizo que los animales empezarán a aparecerse por las casas;entonces algunos humanos se acercaron al nacimiento del agua y vieron que el agua estaba casi seca y tambien vieron mas adelante donde estaban árboles talados y asimilaron que estaban acbando con el Medio Ambiente. Rapidamente se fueron para el pueblo y le dijeron a la gente del daño que le hacían no sólo al monte, sino tambíen a ellos. Y se arrepintieron, al día siguiente, volvieron al monte pero no a talar sino a sembrar árboles para remediar el daño que hacian. El dinero que hicieron ya no les importaba, ya solo les preocupaba el medio ambiente, todo esto fue grascis al cerdo aunque ellos no lo saben y nunca lo sabrán él siempre estará escondido en el monte corriendo y husmeando.
Mientras tanto el cerdo por fin pensó en algo e hizo que los animales empezarán a aparecerse por las casas;entonces algunos humanos se acercaron al nacimiento del agua y vieron que el agua estaba casi seca y tambien vieron mas adelante donde estaban árboles talados y asimilaron que estaban acbando con el Medio Ambiente. Rapidamente se fueron para el pueblo y le dijeron a la gente del daño que le hacían no sólo al monte, sino tambíen a ellos. Y se arrepintieron, al día siguiente, volvieron al monte pero no a talar sino a sembrar árboles para remediar el daño que hacian. El dinero que hicieron ya no les importaba, ya solo les preocupaba el medio ambiente, todo esto fue grascis al cerdo aunque ellos no lo saben y nunca lo sabrán él siempre estará escondido en el monte corriendo y husmeando.
AUTOR: Brayan. Barrera Vanegas, con este cuerto estoy participando del concurso de Cornare 2010
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